No niego que sospechábamos algo, pero después de doce años de haber tenido mi último bebé (el morocho Sebastián), me negaba a creer en esa posibilidad. Los chicos me llamaban cada cinco minutos, mimarido un poco menos pero todos estaban a la expectativa de los resultados que estaban demorando demasiado.
Me devolvieron los resultados del análisis de sangre y la doctora pecosa y jovencita me confirmó que estaba re-embarazada. Para mejor control del tema (y creo que para terminarme de convencer) me derivaron al ginecólogo quien con una ecografía confirmó que una semillita se había posicionado de mi vientre y ya estaban dadas todas las condiciones para que en menos de 30 semanas tenga un nuevo bebé y en consecuencia crezca la familia.
Hace unos días mimarido y el ahora hermano del medio fabricaron una potente luminaria, se prestaron la cámara y el trípode de mi suegro y decidieron grabar una serie de videos dedicados a darle la bienvenida al(la) hermanit@ # 3. Les dejo con el primer video, donde debo admitir que mi participación es la más trucha.
Bebé querido, semillita de mi corazón, va este primer video para vos, de parte de todos.